LETTERING: “GITANO DEL FUTURO”

Créditos
Texto - Claudia Rodríguez, @claaurod
MUAH Y estilismo - Francisco Manch @franciscomunch
Fotógrafo - Juan Bernal @el.chasko

Recuerdo la primera fiesta en la que vi pinchar a Gitano del Futuro: sus mezclas, su look y sus movimientos hicieron que nadie pudiera parar de bailar en la pista, ni siquiera para salir a fumar un cigarro. Más tarde descubrí que no es solo DJ, tampoco cantante urbano ni bailarín de hip hop. Gitano del Futuro es todo eso y mucho más: un personaje vivo que mezcla raíces y vanguardia, clubbing, espectáculo y reivindicación.

Nuestra conversación transcurre en Valencia. En su hotel, Gitano del Futuro se maquilla, se viste, se concentra con la ayuda de su equipo más cercano. En unas horas conquistará Spook Club en la fiesta TOTAL. Aquí me sumo a esa preparación, compartiendo la intimidad de los minutos previos y acompañándole en cada paso.


Tu público espera no solo música sino también un statement visual. ¿Qué importancia tiene para ti el look en la construcción de la experiencia del set, y cómo decides qué mostrar cada noche?

Para mí, el look es una parte fundamental porque describe quién soy cada noche. Aunque “Gitano del Futuro” es un personaje ya definido, me gusta seguir explorando y creando diferentes versiones de mí misme dentro de ese universo. Según cómo me sienta ese día, elijo qué mostrar, y eso también forma parte de la experiencia del set: no solo es música, es una historia que se cuenta también con la imagen. 

Para esta ocasión mi amiga y estilista, Francisco Much, y yo decidimos situar Valencia y su mundo como protagonistas del look, inspirándonos en mujeres valencianas de los 90 como Manuela Trasobares, las “periquitas” valencianas (que así las llamamos nosotras) o las vecinas de valencia con una mezcla de “buchona”.


La estética no es la única parte a destacar de tu set, también das show, bailas... ¿Cómo entiendes esa faceta de performer y hasta qué punto piensas tu set como un show completo más allá de la música?

Desde pequeñe siempre sentí una gran conexión con el arte en general, pero especialmente con el baile y la interpretación. Es algo que forma parte de mí, algo que llevo dentro y que, inevitablemente, tiene que estar presente en lo que muestro al público. No concibo un set solo como una sesión musical, sino como un show completo en el que puedo expresarme desde muchos lugares distintos.


Hace unos años se hablaba de ti como un referente urbano por tu faceta como cantante. ¿Cómo ha evolucionado tu relación con la música vocal y por qué esa parte parece menos presente ahora? ¿Cuándo empiezan los sets y mezclas a ganar peso en tu camino creativo?

Es cierto que en aquel momento conocía muy poco de la escena fuera de lo urbano. Al fin y al cabo, siempre he sido bailarine de hip hop, y esa ha sido la música que me ha acompañado desde que era pequeñe.

Me sentía muy cómode dentro de ese movimiento. Pero con los años fui explorando más allá, y me di cuenta de que no quería quedarme en la etiqueta de “cantante urbana”, sino ser reconocide como une artista integral, capaz de moverse entre distintos géneros musicales y disciplinas, como el DJ o la producción.

Aunque ahora esa faceta vocal pueda parecer menos presente, no la he abandonado en absoluto. De hecho, estoy trabajando en nuevas cosas que espero poder compartir pronto. Empecé a pinchar porque siempre me ha gustado tocar todos los palos, y descubrí que poder mostrar otra parte de mí y hacer bailar a la gente me llena muchísimo, tanto a nivel personal como artístico.

¿Por qué “Gitano del Futuro”? Siempre dices que te gusta responder esta pregunta. ¿Has ido encontrando una respuesta nueva o evolutiva a tu apodo con el paso de los años? ¿Qué significa ahora para ti?

“Gitano del Futuro” nunca fue un concepto simple, sino que nació como un acto político y reivindicativo desde el principio. Representa una declaración de identidad y resistencia, que conecta mis raíces gitanas con una visión de futuro y transformación.

A lo largo de los años, esta idea ha ido evolucionando conmigo, pero siempre manteniendo ese espíritu de lucha y de cuestionar estereotipos.

Ahora para mí, “Gitano del Futuro” es un símbolo de empoderamiento, diversidad y creatividad que me permite conectar con mi historia mientras construyo mi propio camino artístico impulsándome a romper barreras y explorar nuevas formas de expresión.


Hace unos años mencionabas en una entrevista con Aida Camprubí lo mucho que te inspira la cultura Club Kid neoyorquina. Ahora que has podido pinchar en Nueva York, ¿qué emociones te despertó pisar esos espacios míticos, y qué parte de esa energía trajiste de vuelta a tus sesiones aquí?

¿Sientes que ese viaje abre un nuevo capítulo en tu proyecto, quizás más internacional, o te interesa mantener un pie en la escena nacional?

Para mí, poder estar en Nueva York viniendo de un barrio al que muchos llamarían gueto ha sido una experiencia enorme, tanto a nivel personal como artístico. Recuerdo que un día, caminando por las calles de Brooklyn, me dije a mí misme: “Qué fuerte, ¿quién te iba a decir a ti, con todo lo que has pasado y viniendo de donde vienes, que estarías aquí haciendo lo que te gusta y siendo valorade como artista?”.

Sin duda, fue un momento decisivo en mi carrera y me siento motivade a seguir viajando y expandiendo mi proyecto a otras partes del mundo. Esa energía y esa experiencia las traigo conmigo a cada sesión, porque me recuerdan lo importante que es seguir explorando y evolucionando.

Tu personaje funciona casi como si tuviera vida propia: no generas mucho contenido en redes, pero siempre estás active y presente en la escena. ¿A qué crees que se debe que Gitano del Futuro no dependa de la visibilidad digital para mantener su relevancia?

Creo que eso sucede porque mi nombre resuena en la cabeza de las personas justamente por ser poco usual. Esa es la magia de mi proyecto: estar siempre presente, pero sin necesidad de saturar las redes. Quiero que la gente se pregunte qué es, quién es o cómo será un “Gitano del Futuro”. Todo eso tiene un aire de misterio, casi como una especie de brujería, y esa ha sido siempre la idea principal detrás de mi trabajo.

Te hemos visto pinchando en las fiestas más chulas del panorama nacional. ¿Cuál es esa fiesta en la que siempre lo pasas bien? ¿Dónde te gusta bailar con tus amigas?

Normalmente, siempre disfruto mucho en todas las fiestas a las que me invitan. Claro que, como cualquier artista, tengo mis momentos, pero en general siempre paso un buen rato. Suelo apoyar a todo tipo de fiestas y colectivos, tanto del panorama nacional como internacional. Además, me inspiran muches de les artistas y personas que me rodean, como Mia Flaw, Sofixit, Nida, entre otres.


Razzmatazz en Barcelona e Industrial Copera en Granada son los clubs que más te han visto pinchar ¿Qué diferencias encuentras en el público? ¿Influye eso en el tipo de mezclas, canciones que eliges para tus sets?

Para mí, todos los clubs se sienten como un templo. Nunca preparo un set fijo ni me limito a un género definido. En mis sesiones siempre encontrarás de todo, porque me gusta fluir con lo que siento en cada momento y con la energía del público que me acompaña. Esa conexión es clave y, aunque los espacios puedan ser diferentes, mi enfoque siempre es el mismo: crear una experiencia única y auténtica para todes.

Estamos en el backstage y me da curiosidad… antes de salir a pinchar, ¿prefieres estar completamente liste o necesitas unos minutos para ti sole?

Es cierto que me gusta compartir esos momentos con mis amigues, pero siempre desde la tranquilidad, enfocándome en lo que viene y cargándome de energía para darlo todo en el set. Al ser bailarine y haber competido durante años, esa preparación mental es una parte muy presente en mí, y la aplico en casi todo. Siempre necesito mi momento antes de salir al stage para conectar conmigo misme y estar al 100%.



¿Cómo es para ti el ambiente del camerino? ¿Alguna situación graciosa que recuerdes de ahí?

A veces el ambiente en el camerino es tranquilo, y otras veces caótico, jaja. En esos espacios puedes vivir y encontrar de todo. He pasado por situaciones graciosas y otras más estresantes, pero siempre intento que sea un lugar agradable y que quede como un recuerdo lindo.

Recuerdo una vez que estaba en mi momento de preparación mental, intentando concentrarme, pero mi amiga, que estaba súper loca y claramente borracha, no paraba de hacerme coreografías que parecían sacadas de TikTok. Por más que lo intentara, no conseguía centrarme y mi mirada se iba todo el rato hacia ella porque la situación era súper random. Al final tuve que salir disparada del camerino al lavabo porque literal casi me meo en las bragas.

La charla termina y la entrevista queda atrás. Ahora lo que importa es el presente: Gitano del Futuro está en la cabina. Desde Basta no podemos esperar a ver qué nos trae Gitano del Futuro próximamente.

Instagram: @gitanodelfuturo

Soundcloud: gitanodelfuturo