Spanish: ¡Hola! Mi nombre es Mario Obrero, soy un poeta orgullosamente criado en Getafe, una zona industrial a las afueras de Madrid. Igual que Getafe o cualquier extrarradio, la poesía tiene la incansable habilidad para agrupar a una multitud a la vez que permanece fuera de ningún centro o poder. Ya que también vivo en una monarquía, España, podría aspirar a ser parte de la realeza. Sin embargo ni Getafe ni mi sexualidad me permitirían ser príncipe. Menos mal. Me quedaré, así pues, como un poeta gay y plebeyo que charla con sus vecinas de Getafe. Me encantan los erizos y la redistribución de la riqueza.
English: Hi! My name is Mario Obrero, I’m a poet proudly raised in Getafe, an industrial area on the outskirts of Madrid. Just like Getafe or any other suburb, poetry has the indefatigable ability to gather a multitude and, at the same time, remain out of any center or power. Since I also live in a monarchy, Spain, I could wish to be part of the royalty. However, neither Getafe nor my sexual orientation would allow me to be a Prince. Thank goodness. I will remain therefore as a plebeian gay poet that chats with his Getafe neighbors. I love hedgehogs and wealth redistribution.
“Peachtree City”
Spanish: Nueva York se escribió años antes de conocer con mis ojos las esquinas y hojas caídas de la gran manzana. Como creía Guadalupe Grande “la poesía es el arte de abolir el olvido, es decir, hacer posible lo imposible”. En el oficio de las palabras estamos bienvenidas a experimentar, escuchar y observar aquellas vidas que no son concedidas en el espectro limitado y marcado de la normalidad, esto es, la corrección, la eficiencia, el entendimiento. Mantengan estos versos el rebelde espíritu de la poesía para transgredir aquello que se nos deja decir, contar o imaginar. Antes que en la vida particular esta visión nació en la vida del lenguaje, la memoria compartida y la conciencia de ampliar, a través del pequeño erizo poético, lo que se denomina posible y lo que debe ser vivido.
English: New York was written years before knowing with my eyes the corners and fallen leaves of the Big Apple. As Guadalupe Grande believed, “poetry is the art of abolishing forget, that is to say, translating the impossible into possibility”. In the trade of words, we are welcomed to experience, listen, and observe those lives we are not allowed to pursue on the limited, given, and dominant spectrum of normality, that is, correctness, efficiency, and understanding. May these lines maintain the rebel spirit of poetry to transgress what we are allowed to tell, say, or even imagine. Before the individual’s life, this vision grew on the life of language, shared memory, and the awareness of amplifying, through the small hedgehog of poetry, what is said to be possible and what deserves to be lived.
¿No ves la ciudad anegada de ángeles saliendo del prostíbulo y laudistas con una
estrella de pan en sus manos?
Nueva York llena de poemas en los bolsillos y amantes que vuelan con esqueletos de
peces y una gabardina recién comprada
me hundo en el metal y en el ladrillo de los ríos
me hundo como un violín brezado o los fémures más célebres de este parque público
dentro de cajas de hojalata llenas de servilletas con versos en latín
encuentro doce uvas sin semillas heridas por la uña de los océanos
me hundo en el pico de las uvas sonante como el ukelele detrás de las puertas
hay un museo especializado en amaneceres y una sentada pacífica de los líderes de
la Viena Roja frente al mar
así me aparece la ciudad de Nueva York el primer día de dos mil veinte
una gran avioneta de arcilla roja y un escaparate lleno de espejos en medio de la nieve
las taquerías con niños de cilantro
no era así como la vieron mis ojos en mil novecientos diez
entonces los ómnibus ya presentían la llegada de un ruso con la intención de enseñar
quince insultos en su lengua a dos níqueles
me duele la rodilla y los críticos dicen que estoy azul
según Johannes Kepler último astrólogo y primer astrofísico el dolor o incomodidad
parcial en la zona rotular determina un futuro crecimiento del individuo afectado
mi madre que me hace comprar un jersey de cuello alto opina lo mismo
lo importante dice una nube en lo alto del Empire State es no morir en vano
en la frente de los poetas que andan mascando palo de regaliz se lee espiga y se lee
esperanza
se llenan las aguas y el pecho empapado del que abrazó la nieve toda la noche
me despido de mí en este poema porque Johannes Kepler con una tarjeta regalo para
Tycho Brahe anda gritando por la Quinta Avenida
in Terra inest virtus, quae Lunam ciet
me despido de mí y de los comunistas sentimentales que pasean sus sombreros de
paja delante de las catedrales del dólar
en la cola nocturna de las que esperan un chusco de pan duro hablo en friulano de la
luna que no existe
de la ciudad y de las jirafas que no han visto mis ojos
mi rótula crecerá y yo con ella y llegarán los próximos siglos y besaré la frente de mi
abuela en otro idioma
y Nueva York desaparecida en fiebres y cielos escondidos
habla de lo pasado habla de lo futuro
yo amanezco con las uñas azules del ebrio y el tintineo de los frutos.
English Translationestrella de pan en sus manos?
Nueva York llena de poemas en los bolsillos y amantes que vuelan con esqueletos de
peces y una gabardina recién comprada
me hundo en el metal y en el ladrillo de los ríos
me hundo como un violín brezado o los fémures más célebres de este parque público
dentro de cajas de hojalata llenas de servilletas con versos en latín
encuentro doce uvas sin semillas heridas por la uña de los océanos
me hundo en el pico de las uvas sonante como el ukelele detrás de las puertas
hay un museo especializado en amaneceres y una sentada pacífica de los líderes de
la Viena Roja frente al mar
así me aparece la ciudad de Nueva York el primer día de dos mil veinte
una gran avioneta de arcilla roja y un escaparate lleno de espejos en medio de la nieve
las taquerías con niños de cilantro
no era así como la vieron mis ojos en mil novecientos diez
entonces los ómnibus ya presentían la llegada de un ruso con la intención de enseñar
quince insultos en su lengua a dos níqueles
me duele la rodilla y los críticos dicen que estoy azul
según Johannes Kepler último astrólogo y primer astrofísico el dolor o incomodidad
parcial en la zona rotular determina un futuro crecimiento del individuo afectado
mi madre que me hace comprar un jersey de cuello alto opina lo mismo
lo importante dice una nube en lo alto del Empire State es no morir en vano
en la frente de los poetas que andan mascando palo de regaliz se lee espiga y se lee
esperanza
se llenan las aguas y el pecho empapado del que abrazó la nieve toda la noche
me despido de mí en este poema porque Johannes Kepler con una tarjeta regalo para
Tycho Brahe anda gritando por la Quinta Avenida
in Terra inest virtus, quae Lunam ciet
me despido de mí y de los comunistas sentimentales que pasean sus sombreros de
paja delante de las catedrales del dólar
en la cola nocturna de las que esperan un chusco de pan duro hablo en friulano de la
luna que no existe
de la ciudad y de las jirafas que no han visto mis ojos
mi rótula crecerá y yo con ella y llegarán los próximos siglos y besaré la frente de mi
abuela en otro idioma
y Nueva York desaparecida en fiebres y cielos escondidos
habla de lo pasado habla de lo futuro
yo amanezco con las uñas azules del ebrio y el tintineo de los frutos.
Don’t you see the city flooded with angels escaping from the brothels and lutenists with
bread stars on their hands?
New York is full of poems in the pocket and lovers flying with fishbones on a new trench
coat
I sink on the fluvial metals and bricks
I do sink like cuddled violins or the most renowned femurs of this public park
inside tin boxes full of napkins with lines in Latin
I find twelve seedless grapes wounded by the ocean’s nails
I sink on the grapes’ beak loudly like ukeleles standing by the other side of the door
there is a specialized museum for dawns and a pacifist sit-in with Red Vienna’s
leaders facing the sea
this is how New York City appears to me on the first day of twenty-twenty
a great aircraft of clay and store windows full of snowed mirrors
taco shops with cilantro teens
not such did my eyes observe by nineteen-ten
back then the buses already expected a Russian teaching insults on his mother tongue
two nickels each
my knee hurts and critics establish that I am blue
following Johannes Kepler the last astrologer and first astrophysicist partial pain or
soreness in the patellar area might determine the future growth of the affected subject
my mother who encourages me to buy a turtle neck sweater believes quite the same
the important is not to die in vain argues a cloud on top of the Empire State
in the forehead of those poets that chew licorice sticks hope and sprigs can be read
waters fill and the wet pit of whom hugged the snow all night long
I say goodbye to myself in this poem because Johannes Kepler has started shrieking
across Fifth Avenue with a gift card in hand to Tycho Brahe
in Terra inest virtus, quae Lunam ciet!
I say goodbye to myself and to the tender communists who show off their straw hats in
front of dollar cathedrals
on the dark line of those who wait for a slice of stale bread I have a word in friulian
about the moon
that does not exist
about the city and the giraffes unseen by my eyes
my patella will grow and so will I
during the next centuries I will kiss my grandma’s face in another language
and New York disappearing in fevers and masked skies
speak about the past speak about the future
I wake up with the drunk’s blue nails and the jingling of fruits.